martes, noviembre 29, 2005

realidaD::::

"Te conocí por casualidad.Y por destino supe tu historia.
Esa misma que –creo- te va a pesar toda tu vida.

Desde que me hablaste te sentí diferente.Una niñita casi mujer que se escondía detrás de faldas y pelo y color.
Eras única a tu modo; nadie como tú hablaba de esa forma, ni tenía las cosas tan claras.Te sentías fuerte a rabiar, tenías mil historias, todo te había transformado y cambiado profundamente, incluso esa persona que por más que habías querido borrar, se colaba entre el tiempo y no te dejaba respirar tranquila.

Todavía a veces encontrabas rastros de humedad.
De cariño, de amor dicho a ratos.
De un miedo profundo, de ternura compartida, de ilusiones ocultas…Incluso; de amor.

Aprendiste a amar cuando menos lo esperabas.Llegaste a querer tanto; que lo preferías compartido a vaciar tu vida.
No era perfecto, pero se acercaba peligrosamente a lo que siempre habías soñado.
Y era tierno, y directo, y dispuesto, y leal.A los dos los movía el miedo.
A los dos les encantaba amar.

Y ahora has aprendido a soñar despierta.Insisto, te conocí por casualidad, pero a la primera conversación me dieron unas ganas gigantes de escucharte, de saber de tí…Ya han pasado casi 2 meses desde el primer día en que nos vimos.
Entre nosotras, se ha formado una complicidad eterna.Nos encanta sentirnos cerca, amamos saber que tenemos el mundo entero para nosotras…La confianza es a mango.El cariño, las ganas, la amistad también.Y es que encontré en ti la persona ideal para desahogar todos mis miedos, todas mis alegrías… te fuiste convirtiendo poco a poco en un trocito de mí …

Siempre te preguntabas a donde van las palabras dichas, los cariños entregados…Donde quedaba tanto que se había dado, que pasaba con tanto que se dio…Y te daba miedo querer, sufrir, por que sabías que aunque había amor entre los dos; no había compromiso, ni responsabilidad… ni ganas de hacer las cosas bien.
No entendían que el universo era tan eterno como ustedes quisieran.Aprendieron a mentirse demasiado luego.Usaron excusas cuando aún no valían la pena.

Y es que si es cuestión de confesar, sé que ella lo quiso con toda su alma.El problema no fue el amor, sino la valentía, el atreverse, el aperrar…Y sufrieron como imbéciles por opción propia.El destino era demasiado irónico como para entenderlo.Construyeron demasiado.
Lloraron demasiado.
Y es que, ¿para qué seguir atándose?

Los días comenzaron a hacerse copias uno de otros.
Veía como poco a poco se iba apagando esa mujer con tantas ganas de reir.
Y es que aunque no lo quisiera, ni lo asumiera; sabía tontamente que era él su motivo de risa.
Siempre supo que cuando hay que hablar de dos, hay que empezar por uno mismo; pero nunca pudo olvidar la cantidad de veces que se dijeron te quiero.
Nunca pudo llegar a asumir que gran parte de su historia, era gracias a él.

Y a veces lo necesitaba tanto…Y se creaba un vacío gigante dentro de ella.

Yo veía como trataba de seguir adelante.Y a la vez como le dolía no poder caminar si no estaba él.

Quizás nunca sepa como terminaran de vivir su propia historia.Lo más probable es que ellos tampoco lo sepan.Que cuando pasen años, se den cuenta de la magia que tenían enfrente de sus ojos y nunca aprovecharon.
A lo mejor están hechos para vivir toda su vida juntos, quizás por eso quieren esperar un tiempo para poder vivir…Aunque por mientras… todo duela demasiado…"


:::

Este es un cuento, una historia que sé es más palpable de lo que se siente.
Se la hice a una amiga... y... acá está.
Cualquier coincidencia con la realidad, es eso: la realidad...