domingo, noviembre 07, 2010

Lluvia

Llueve adentro y afuera.
Llueve en el alma, llueve partida en dos, llueven las ganas, todo llueve.
Llueve porque me arrepiento, llueve porque te creí, llueve porque fue mi culpa.
Llueve porque había demasiado calor en mi vida, y era obvio que no iba a durar mucho.
Llueve porque acá adentro, todo es una nueva batalla, todo sigue igual a cómo lo dejamos.
Llueve porque la soledad me espera, llueve porque tengo terror, llueve porque me duele como nunca.

Llueve por todas las veces en las que yo sabía que esto iba a terminar mal,
llueve por todas las veces en las que me hiciste sonreir,
llueve por todas las veces que me han herido, que me han negado,
llueve por todas las veces que volví a los lugares donde te amé, loca y borracha.

Llueve por todo lo que me duele volver a mirar el mundo sola,
llueve porque siempre creí que la vida me iba a dar una segunda oportunidad,
llueve porque estoy partida en dos, profundamente partida en dos, y no sé quién me podrá sanar,
llueve porque soy frágil, porque me quebro y nadie puede volver a poner las piezas en su lugar.

Llueve por todos los cobardes, los que no dan la cara, los maricones, los que me duelen,
llueve por sentirme sola, llueve por los truenos dentro de mi alma,
llueve por el temor que siento de perderme, perderte y perder la razón.

Llueve, acá adentro todo llueve.