miércoles, enero 28, 2009

CuerPo:..:::::

"Cuando seas grande mi amor, y me preguntes por mis tatuajes te contaré mi historia.
Te contaré que los surcos, los dibujos que tengo no los elegí al azar,
que cada uno tiene un significado,
que cada uno me dolió lo mismo que me dolió el hacérmelo,
pero no me arrepiento mi amor,
no me arrepiento porque son parte de mi,
tal como tú serás parte de mi.

Ojalá no creas que soy una mamá loca por tener estos dibujos,
por dármelas de rebelde y creer que dibujando mis dolores en mi piel puedo olvidarlos,
porque no es así;
para mi son magia, son los recuerdos de quien soy;
Mis alas son para volar mi amor, para volar lejos y si quieres podemos volar juntos cuando tengamos pena y odiemos el mundo,

el signo que tengo adelante es la llave de la vida amor, y simboliza que todo empieza y todo termina; el ciclo de la vida donde tú tendras mucho que ver,
porque te habré hecho con todo el cariño del mundo y cada vez que mire a tus ojos me harás orgullosa,
el que tengo en el pie es una hada amor,
una hada que nos cuida de que nada nos pase,
y el del brazo es un símbolo, un regalo a mis seres queridos;
a mis hermanas que tanto adoro,
a mis mejores amigas y a Dios mi amor,
a Dios por darme siempre días más de vida,
vida para mirarte y poder explicarte qué son estos surcos,
qué es lo que tengo en la piel,

Y no me mires raro amor,
porque eso es sólo por fuera, es sólo la forma,
el fondo está intacto;
el fondo, mi alma te ama como nunca, y aunque sea una mamá con dibujos,
te cuidaré y amaré por siempre mi niñito..."

Conversando, una amiga me preguntó que le diría a mi hijo o hija si el día de mañana me preguntara por mis tatuajes.
Acá está la respuesta Feña...